El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, ha destacado que la relación institucional durante los últimos meses ha sido “extraordinaria”, a pesar de los inconvenientes derivados de la decisión de no trasladar a la isla una competición protagonizada por un equipo de Israel. Según Morales, la cancelación respondió a la necesidad de evitar los “incidentes” que tal participación podría generar alrededor de Israel, con el consiguiente riesgo de “crispación, enfrentamiento” y una imagen negativa para la isla.
No obstante, el presidente subrayó que, más allá del revés, se ha mantenido “una comprensión, un diálogo” fluido y unas relaciones “buenas y abiertas”.
Compromiso y futuro de la organización del evento
A pesar de la decisión actual, Antonio Morales se mostró optimista respecto al futuro y anunció que las puertas siguen abiertas para que la isla pueda acoger nuevamente la prueba. “Estamos totalmente abiertos a que en el año 2027 podamos hacer posible la Vuelta Ciclista a España”, afirmó con ilusión.
Añadió que, desde su gobierno, “no hay ninguna duda de que haremos todo lo que esté en nuestras manos para hacerlo posible”. Asimismo, expresó su deseo de que se pueda confirmar cuanto antes ese retorno, manifestando su “encanto” ante la posibilidad de volver a traer la competición a Gran Canaria.
El presidente del Cabildo remarcó que la decisión adoptada —aunque difícil— busca preservar la estabilidad social y la imagen de Gran Canaria. Al mismo tiempo, insistió en la disposición del Cabildo a retomar negociaciones y colaborar con los organizadores de la Vuelta Ciclista a España para lograr que Gran Canaria sea sede del evento en 2027.
Con este anuncio, el Cabildo reafirma su compromiso con el deporte, la promoción internacional de la isla y el deseo de ofrecer a Gran Canaria visibilidad y oportunidades de crecimiento vinculadas al turismo deportivo.
ACFI PRESS